De picnic en picnic

A tres meses de nuestra llegada nuestra rutina ya es bastante parecida a la de la gente local, y la verdad que esta buena!
Empezando por la maniana, aunque está claro que levantarnos nos cuesta un poco mas que a los suizos ya que salimos de la cama a las 7 de la maniana, hora en la que todo ya comenzó.
Jamás pensé que a las 8 y media de la maniana estaría llevando a Male al jardín en bicicleta! Ambas con casco, por supuesto, por el borde del lago, saludando a los trenes que pasan o a los patos que nadan. Y si no es así, será en el cochecito con papá o mamá atravezando por el medio al campo, entre vacas y ovejas.    
El almuerzo a la orilla del lago tambien ya es parte del día, como les conté en un post anterior.
Y luego de la siesta de Male (bien temprano, de 13 a 15hs) me pongo a pensar en la actividad de la tarde.
Clari sale del colegio temprano (15.30) lo que nos da tiempo a hacer uno o dos programas. Con la llegada de la primavera y los dias lindos el problema surge cuando tenemos que decidir por alguna de todas las  alternativas. Y siempre elegimos un picnic en una plaza; o en esta orilla del lago con piedritas, cisnes y patos; o en aquella otra con juegos; o en el playground de aca a la vuelta; o tambien puede ser en el balcón de casa así luego salimos a andar en bicicleta...   
En estas fotos verán cómo nos divertimos (mientras el pobre Fer trabaja!!!)