Berna

Conocimos la capital nacional! De las capitales que hemos visitado, la mas tranquila! Si bien tiene cierta zona comercial con mas movimiento, en líneas generales es una ciudad bien silenciosa.
Muchísimos turistas, sin embargo parecía que solo los encontrábamos en el Paseo de los Osos, que es una explanada a la orilla del río hecha en 2009. Sus bordes son de cristal, lo que te permite ver a tu derecha a los osos ( símbolo de la ciudad del que solo vimos su espalda ya que los pobres animales estaban agotados del calor, durmiendo la siesta detras de los árboles) y un río increíblemente impecable, profundo y verde, color que probablemente se de por la vegetación al margen.

Siguiendo la "línea azul" recomendada por la oficina de turismo, a este paseo se accede a través del Nydeggbrucke, uno de los puentes que separa el casco historico de la ciudad nueva y residencial. La vista desde este puente es muy bonita:

Al ser sábado llegamos al mercado semanal, super importante y con buenos productos de todo tipo ( si hasta artesanos argentinos habia!).
El Capitolio, donde se celebran las sesiones del parlamento llama la atención por su cúpula dorada:

Su catedral tiene una torre notablemente alta para su tamaño, pero está en reparación por lo que no se luce aún. Llama la atención desde cualquier punto de vista.
Marktgasse, que luego se convierte en Kramgasse, es su calle comercial mas importante con galerías de arcadas que van a lo largo de la avenida dejando paso a buses y trams que circulan por el medio. Pero en sus veredas el tránsito de gente es enorme, los negocios exponen sus artículos y los restaurants sacan sus mesas afuera por lo que la circulación puede complicarse y obligar al peatón a bajar y caminar por la orilla de la calle. Aun asi pareciera que todo esto es armonioso.

Monumento obligado para cualquier turista: La torre del reloj (Zytglogge), que a la hora en punto hace sonar su reloj y despliega los muñecos que lo decoran (llegamos quince minutos antes y no tuvimos la paciencia para quedarnos a verlo !). Es realmente divino y esta impecable.

Qué cosas me llamaron la atención de esta ciudad? Primero, y sobre todo, su sistema de transporte público. Debido a que la ciudad vieja es pequeña se puede hacer perfectamente caminando por lo que al llegar el turista se encuentra con 4 estacionamientos subterraneos donde dejar el auto. Desde ese momento verá todo el casco cruzado por los cables de los trams rojos que lo recorren y unen con los suburbios. Avanzan como reyes, acompañados por los buses articulados del mismo color, y que no se te ocurra cruzarte!

Muchisimas fuentes en el centro de sus calles, brillantes como si hubieran sido restauradas ayer y funcionando impecablemente.

Geranios colorados y banderas nacionales y cantonales decoran ventanas y balcones:

Luego de 4 horas y media de caminata emprendimos la vuelta hacia Zug. Habrán notado la ausencia de nuestra modelo estrella, Clarita. Es que esta vez no nos acompañó ya que, felizmente, eligió pasar el día con Arrieta y Sidney (amigas del colegio) e ir juntas al cumple de Natalie en Unterageri. Nos reencontramos con ella a las 7 de la tarde, maquillada, con uñas pintadas y muy contenta tras un dia a cargo de Marian, la mamá de Arrieta. La felicidad de Malena al verla quedó reflejada en esta foto que compartimos con todos ustedes: